Ruta de 3 días por Azores

 Visitamos Azores, 3 días y medio para ver la isla. Concretamente estamos en Sao Miguel, alojados en el pueblo de Ponta Delgada, en The Holly Cow. Esta será nuestra base para movernos. La idea es hacer un día oeste, centro-norte y nordeste. Como curiosidad, Sao Miguel es llamada la Ilha Verde, es impresionante el verde que tiene en cualquier lado que mires. Además, la limpieza es brutal.



Día 1: parte oeste

El primer lugar que visitamos es el Mirador da Grota do Inferno. Es uno de los más famosos y conviene ir pronto. Hay un parking donde puedes dejar el coche. La señal de la ruta de senderismo te lleva a otros miradores y lagos. Si quieres ver este hay que ir al lado contrario, pasando por los lados de un portal al lado de la carretera. Sigues el camino y nada más entrar está el lago del Canario. Siguiendo unos 500 metros o algo más, llegaremos al mirador.




El Lago do Canario bien vale también una buena parada.



Después nos vamos a ver el Mirador Vista do Rei. Está al lado de un hotel el ruinas.



Lo dejamos y nos dirigimos hacia Mosteiros, en la costa oeste. Pasamos por el canal das Setes Cidades, el puente que se ve en la foto de arriba.



Llegamos a Mosteiros. Comemos allí en el Restaurante O Américo de Barbosa, con el pulpo a la brasa como su especialidad, y de postre un pudding de feijão.

Para reposar la comida, nos vamos a la playa de Mosteiros, es volcánica también, de arena negra. Echamos allí casi toda la tarde aprovechando que hacía buen día y calor. Tiene duchas y chiringuitos para tomar algo o comer.




Hacia final de tarde, nos vamos al Mirador de Ponta do Escalvado.



Para acabar el día, nos vamos a las Termas da Ponte de Ferraria. Son gratuitas. Hay que andar unos 300 metros desde el spa del mismo nombre. Llegas a una piscina pegada al mar pero de agua caliente. Tienes que tener en cuenta que con marea alta o con oleaje, el agua no se nota tan caliente porque entra agua de mar fría. Pero con marea baja y mar calmo se nota mucho, y sobre todo cuando más pegado a las rocas alejadas del mar, lo verás porque es donde sale el humo del suelo.



Al lado de esta piscina está la Porta do Diabo, que no es más que arcos formados por la lava sobre el mar.



Saliendo de esta zona, hay un pequeño mirador al faro donde saqué esta foto que me gustó, con las vacas pastando y el faro de fondo.



Para acabar el primer día, cenamos en el Restaurante Farol, en Ponta Delgada.

Día 2: parte centro y norte

Para empezar el día, ponemos rumbo directamente al Miradouro do Pico da Barrosa, sobre la Lagoa de Fogo. Probablemente es la mejor vista de Azores, al menos para mí, nos encantó.



Siguiendo el camino, paramos en el Miradouro da Praia da Lagoa do Fogo, para tomar otra visión de la laguna.



Paramos ahora en la Caldeira Velha. Hay que pagar entrada y puedes estar sobre 1 hora y media. Hay varios tipos, visita para ver y visita para disfrutar de las termas y cascada. Hay sitio para cambiarse dentro y darse una ducha de agua fría. Hay un par de termas de agua caliente y una de agua templada con cascada. Como curiosidad, el agua de la cascada hace no mucho era también caliente, pero unas obras para hacer otras termas cerca hizo que el agua llegara ya de forma templada como está ahora.





Una vez relajados, nos vamos a ver la Cascada del Salto do Cabrito. A unos 400 metros verás un parking, pero te puedes meter hacia la izquierda y seguir el camino hacia la cascada. Es una bajada muy pronunciada, aunque bien asfaltada. En algún tramo no caben dos coches, con lo que cuidado. Abajo de todo hay otro parking y de ahí la cascada ya está a 100 metros.



Siguiente punto, al Mirador de Santa Iria.



Seguimos para ver la plantación de té de Gorreana. Hicimos visita primero por su fábrica, gratis. Allí hicimos descanso para un pica-pica y matar el hambre. Nos fuimos después a ver las plantaciones. Impresionante la cantidad que hay.





Último mirador del día, Miradouro Pico de Ferro. Desde ahí hay vistas sobre la Lagoa das Furnas.



Bajamos hasta la laguna para ver las fumarolas calientes y burbujeantes. Aquí tienen unos agujeros en el suelo y hacen cocido dentro de ellos si reservas previamente. La entrada es de pago. Además también se puede visitar un parque desde dentro, pagando nuevamente. Nosotros no lo hicimos.



Para acabar, nos vamos a la Poça de Dona Beija, donde hay varias termas de agua caliente. También puedes ir al Parque Terra Nostra y sus termas, aunque a nosotros se nos hizo tarde y ya cerraran. Después de salir de ahí puede pasar por Queijaria Furnense, para degustar una tabla de quesos de la isla.



Día 3: parte nordeste

Como tenía ganas de ir a Parque de Terra Nostra, este fue el primer lugar al que fuimos. Estuvimos toda la mañana prácticamente, disfrutando de su estanque de agua caliente, que a pesar de su color se puede bañar uno sin problema, además es tan grande que aunque haya mucha gente se está bien. Dentro del recinto también podemos disfrutar del jardín botánico, vale la pena. Lo bueno de aquí es que puedes echar todo el tiempo que quieras hasta la hora de cierre.





Después ya iniciamos la visita al nordeste, vamos directo a Ribeira de Caldeiroes, para ver la cascada y los molinos que tiene. Antes de ir, hacemos comida en un restaurante cercano llamado Poço Azul.



Seguimos hacia el Mirador do Sossego, que da a la parte este de la isla. Aquí nos pilló algo de lluvia y niebla. Como anécdota, tanto en este mirador como en el siguiente, hay bastantes gatos.



El siguiente, Mirador da Ponta Madrugada.



Para acabar el día vamos a hacer la ruta de la cascata do Salto do Prego. Es una ruta lineal de unos 2 kilómetros por el bosque, algo durilla sobre todo si llueve o ha llovido, porque hay lodo y el camino puede estar resbaladizo. Como curiosidad, durante durante el camino ves gallinas y gallos en cualquier parte, y al principio ves patos e incluso algún conejo. El final del camino, llegas a la cascada.



Ponta Delgada

Si te queda algo de tiempo, puedes pasearte por las calles de la capital de la isla y ver sus contrastes y monumentos más importantes. Abajo la foto de las puertas de la ciudad y dos de las principales tiendas de quesos, el Rey y el Príncipe de los quesos.



Consejo

Es normal que llegues a un mirador y lo encuentres lleno de niebla y no puedas disfrutar de las vistas. Para ello, hay una página con cámaras donde puedes mirar en tiempo real, pero mira varias veces, que la situación puede cambiar en pocos minutos. La página es Spot Azores.


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